Los procesos de desarrollo personal y comunitario tienen diversos tiempos y espacios, aconteciendo con el pulso personal y social. Hay procesos de muy diversas naturalezas y todos presentan una característica común, que pueden ser infinitos, pues un proceso lleva implícita la mejora continua y se traza en base a una idea proyectada, en un contexto concreto, que va evolucionando, enriqueciéndose, mirando más allá. El proceso sigue su camino mientras unas personas entran y otras salen.
El Servicio de Convivencia ha cesado este año su actividad en el barrio de Puerta del Ángel tras tres años de trabajo en los que se han facilitado y apoyado diferentes procesos comunitarios. Tras el análisis de la realidad y el contacto con diferentes interlocutores el servicio ha servido para crear espacios de encuentro entre vecinos y entidades del barrio para la mejora de diferentes aspectos del entorno como la limpieza, la revitalización de espacios públicos, la dinamización comercial, la participación vecinal, la economía colaborativa, la integración y la salud comunitaria.
Detectadas numerosas mejoras en el proceder de la vida cotidiana en el barrio, sostenidas principalmente por agentes sociales activos en uno o varios nodos de actividad social, el Servicio ha estimado adecuado retirarse del escenario social. Le queremos dar las gracias a todas las personas y colectivos que durante nuestro proceso de trabajo en Puerta del Ángel han analizado y contrastado la realidad del estado de convivencia, cocreado soluciones a problemas detectados colectivamente, reducido la hostilidad del entorno y generado junto al Servicio alegría comunitaria. Deseamos haber semillado lo suficiente, y que germinen muchas semillas más, que prosperen las germinadas y sean árbol, árbol de muchas raíces, árbol intercultural, intergeneracional. Sigue la salud comunitaria adelante, una mirada desde la que seguir creando un barrio mejor. Únete a los colectivos locales y haz de tu entorno un lugar mejor, lo disfrutas, lo disfrutamos, Madrid lo agradece.