El pasado viernes 12 de mayo, a pesar de la lluvia y el viento, celebramos #SomosORCASUR. Unas 180 personas se acercaron durante la tarde al Centro Cultural de Orcasur (Plaza del pueblo, 2), donde nos refugiamos para compartir voces y sentires, amenizado con bailes de diversos grupos del barrio (las chicas de Revuelo, las de Doposcuola y Tiempo Joven de Tomillo).
Mayores, Curris, Usera Brilla, niños y niñas compartieron espacio en este primer encuentro comunitario, al que también asistieron compañeras de distintos recursos de la Junta de Distrito (Mediación Intercultural, Inmigración, Vivienda, etc.). Cámara, Barrio y Acción, además de asistir las cuestiones audiovisuales, nos ofreció un espacio de papel donde hacer «borrón y cuenta nueva», dejando nuestros arrepentimientos atrás. ADCIL, La Virgen de África y el propio Servicio de Convivencia ofreció talleres, facilitando la socialización positiva en torno a la creatividad. Las mujeres de Los Martes de Orcasur, junto a las abuelas de La Jara y las de ICEAS exhibieron sus artesanías como muestra de sororidad. El Colegio María Reina y miembros de la comunidad educativa abrazaron así mismo el evento.
También nos visitó la Biblioteca Gabriel García Márquez, que trajo su apoyo incondicional al desarrollo comunitario de la cultura y libros y revistas para regalar. Y el mapa de los Madriles, que nos facilitó la pista para no perder iniciativas en el barrio. Cabe destacar la participación de la Mesa de Orcasur en el Foro Local de Usera, que compartió su entusiasmo por canalizar las luchas del barrio y la necesidad de contar con jóvenes para trabajar por el barrio. Justamente, nutrida de jóvenes estuvo la mesa de la Asociación de Vecinos de Orcasur, quienes también contribuyeron a la lista de propuestas de barrio colgada en el tenderete.
La carta abierta de Bea nos sobrecogió, trayendo entre nosotras a Raúl, el hijo de su amiga Milagros, la quiosquera del barrio, más allá de su voluntad de dejar este mundo, y poniendo en valor la solidaridad unánime de este barrio humilde, que, de a poquitos, entre la urgencia y la importancia, logró organizarse con la máxima eficacia y reunir los recursos necesarios para el sepelio de este joven. #SomosORCASUR fraterno y tenemos presentes también a los que se fueron y a los que están por venir.
Y ya que quedaron poemas por recitar, propuestas por madurar y ganas de bailar, seguiremos celebrando encuentros donde explorar talentos entre el vecindario, donde desarrollar ideas y cocrear barrio. Agradecemos a todos los asistentes su implicación y al Centro Cultural la acogida.